Hoy quiero hablaros sobre la hiperhidrosis, también conocida como sudoración excesiva. He decidido tratar este tema porque recientemente tuve una paciente que me pidió ayuda debido a que sufría mucho por este problema. Ella me contaba que le sudaban muchísimo las manos y las axilas, y que, aunque se duchaba tres o cuatro veces al día, apenas salía de la ducha, volvía a estar llena de sudor. Esta situación le generaba un gran malestar, especialmente en su trabajo como peluquera, ya que temía que sus clientas la consideraran una persona sucia o desaseada. Vino a mi consulta buscando una solución.
El sistema nervioso simpático es responsable de activar las glándulas sudoríparas ecrinas, que son las principales responsables de la producción de sudor en nuestro cuerpo. Estas glándulas, ubicadas en gran número en áreas como las palmas de las manos, plantas de los pies y axilas, secretan sudor para regular la temperatura corporal.
Sin embargo, cuando el sistema nervioso simpático se vuelve hiperactivo, puede llevar a un exceso de sudor, una condición conocida como hiperhidrosis, que puede afectar significativamente la calidad de vida de quienes la padecen.
Por lo que si la sudoración excesiva te acompleja o genera inseguridad en tu día a día, sigue leyendo, porque te cuento cómo combatirlo, con los mejores tratamientos para la hiperhidrosis.
¿Qué es la hiperhidrosis?
La hiperhidrosis puede ser focalizada, como en el caso de mi paciente, en axilas y palmas de las manos, o generalizada. En ocasiones, está asociada a enfermedades como el hipertiroidismo, por lo que siempre se recomienda hacer una analítica con hormonas tiroideas para descartar disfunciones. También puede estar relacionada con la obesidad, la diabetes o el embarazo.
Tipos de hiperhidrosis
- Hiperhidrosis focal: Afecta áreas específicas como las axilas, las manos o los pies.
- Hiperhidrosis generalizada: Afecta todo el cuerpo.
- Primaria: No está asociada a ninguna enfermedad subyacente.
- Secundaria: Está relacionada con alguna condición médica, como el hipertiroidismo.
Tratamientos para la sudoración excesiva
1. Desodorantes con sales de aluminio
Para casos leves, se recomienda el uso de desodorantes con sales de aluminio. Inicialmente, deben usarse todos los días y luego hacer un mantenimiento dos o tres veces a la semana. Sin embargo, estos desodorantes pueden causar irritación y escozor en algunos pacientes.
2. Iontoforesis
Este tratamiento utiliza aparatos que emiten una corriente eléctrica para cerrar temporalmente las glándulas sudoríparas. Los dispositivos de uso domiciliario son cómodos porque permiten al paciente realizar el tratamiento en casa. Inicialmente, se recomienda usarlos todos los días, luego dos o tres veces a la semana y finalmente, una vez al mes. Puede causar sequedad e irritación en la piel y es algo molesto durante su aplicación.
3. Fármacos anticolinérgicos
Son útiles para la sudoración generalizada, pero algunos pacientes no los toleran bien debido a efectos secundarios como visión borrosa, boca seca, ojos secos y palpitaciones.
4. Tratamiento quirúrgico
Simpatectomía
Es un tratamiento definitivo que implica la sección de los ganglios simpáticos para detener la función de las glándulas sudoríparas. Este procedimiento es más común.
Neuromoduladores
El tratamiento con neuromoduladores es muy conocido y efectivo para la hiperhidrosis. Se aplica especialmente en axilas, palmas y plantas de los pies. Previo al tratamiento, se utiliza crema anestésica, betadine y polvos de talco para identificar las zonas con mayor sudoración.
El efecto del fármaco neuromodulador en estas áreas suele durar alrededor de nueve meses, proporcionando un gran alivio a los pacientes. Este tratamiento lo realizamos en el Centro Médico Estético Dra. Ubillos. Solicita más información sin compromiso.
MiraDry®
Finalmente, quiero mencionar el tratamiento más novedoso para la hiperhidrosis: MiraDry®. Este aparato utiliza microondas controladas para eliminar aproximadamente el 80% de las glándulas sudoríparas en una sola sesión. Aunque es un tratamiento muy eficaz, tiene un coste elevado y puede no estar al alcance de todos.
Dile adiós a la sudoración excesiva: encuentra el tratamiento ideal para ti
En resumen, la hiperhidrosis es una condición que puede afectar significativamente la calidad de vida de quienes la padecen. Existen múltiples tratamientos disponibles, desde opciones menos invasivas como desodorantes y iontoforesis, hasta tratamientos más definitivos como la cirugía y el uso de neuromoduladores. Cada paciente es único y es importante encontrar el tratamiento que mejor se adapte a sus necesidades.
Espero que esta información os haya sido útil. Si tenéis alguna duda o queréis más información, no dudéis en consultarme. ¡Hasta la próxima!
Deja tu comentario